20/06/2024
Con la llegada del verano y las temperaturas más altas, cada vez más personas se plantean instalar un equipo de aire acondicionado en sus viviendas para sobrellevar mejor el calor en los días más sofocantes del año. Con olas de calor cada vez más recurrentes y temperaturas cada vez más altas, disponer de aire acondicionado en tu casa se convierte en muchos casos en una necesidad para mantener el bienestar en tu hogar.
Sin embargo, ¿qué ocurre si vives en un piso de alquiler que no cuenta con aire acondicionado y quieres instalar un equipo? En ese caso, pueden surgir dudas sobre si puedes hacerlo y quién debe hacerse cargo de ello. Lo principal es que debes tener en cuenta que puedes instalar un aire acondicionado en tu vivienda sin problema, pero que deberás contar con el visto bueno del propietario.
Como cualquier otra obra o modificación de una vivienda, instalar un aparato de aire acondicionado requiere del consentimiento del dueño del inmueble. Por eso, lo aconsejable siempre es mantener una buena comunicación y llegar a un acuerdo por adelantado. Es muy posible que el propietario tenga sus propios planes sobre este aspecto, y puede que incluso pueda aconsejarte o indicarte el modo en el que quiere que se haga.
Además, debes tener en cuenta que el contrato de arrendamiento puede incluir alguna cláusula que no permita realizar instalaciones o modificaciones en la vivienda alquilada. Por eso, deberás cerciórate antes de nada de que el acuerdo que firmaste con tu casero te permite realizar este tipo de cambios. De no ser así, deberás negociarlo con el propietario, puesto que, de no hacerlo, podrías enfrentarte a consecuencias como la pérdida de la fianza.
Si finalmente tu casero accede a permitir la instalación del equipo, deberás tener en cuenta que muy probablemente te corresponderá pagarlo a ti, ya que se trata de una modificación en la estructura del piso. De ser así, no olvides que el aire acondicionado será tuyo, y que podrás llevártelo cuando se acabe el contrato de alquiler o decidas abandonar el piso.
Sin embargo, también puede darse la situación de que el arrendador comprenda la necesidad de instalar un aire acondicionado en casa y decida correr con los gastos para su adquisición. En ese caso, el equipo no será de tu propiedad, por lo que podrás disfrutarlo mientras sigas residiendo en el inmueble, pero no podrás llevártelo cuando te marches. Muchas veces esta será la opción más ventajosa, ya que el propietario puede estar interesado en hacer más atractiva su vivienda para futuros inquilinos mejorando su bienestar.
Caso distinto será si la vivienda ya cuenta con aire acondicionado, pero este sufre una avería. Como con cualquier otro electrodoméstico o elemento de la casa, lo primero que deberás hacer será notificarlo a tu casero para proceder a su reparación. Si el sistema se ha roto por causas ajenas a ti, no tendrás que pagar el arreglo o la sustitución del aparato. En cambio, si el daño se debe a un mal uso, tendrás que pagar por repararlo para que siga funcionando para futuros inquilinos.