19/12/2024
La cesión de un contrato de alquiler es un mecanismo mediante el cual el inquilino transfiere a un tercero todos sus derechos y obligaciones derivados del contrato de arrendamiento. De esta manera, este último pasa a ocupar su posición en la relación con el arrendador.
En este artículo te explicamos algunos aspectos clave sobre este proceso, ya que requiere cumplir ciertos requisitos legales para evitar conflictos con el propietario.
¿Qué implica la cesión?
La cesión del contrato de alquiler supone para el nuevo inquilino:
- Ocupar el lugar del inquilino original en el contrato de arrendamiento.
- Asumir el pago de la renta y las demás obligaciones establecidas en el contrato original.
- Recibe derechos como el uso de la vivienda y las condiciones acordadas con el propietario.
Por su parte, el inquilino que cede el contrato, queda totalmente desvinculado de las responsabilidades contractuales salvo que se haya acordado lo contrario.
Consentimiento del arrendador
Para que la cesión sea posible y válida, el propietario debe reflejar por escrito su consentimiento. Si esta cesión se realiza sin su consentimiento, podría considerarse una infracción del contrato y dar lugar a su resolución.
Requisitos y consecuencias
La renta y las condiciones del contrato original se mantienen, salvo que las partes acuerden algo diferente.
Una vez se produzca la cesión, el nuevo inquilino asume todas las obligaciones y condiciones del contrato, incluyendo el pago de la fianza.
¿La cesión es lo mismo que el subarrendamiento?
La respuesta corta es no. La cesión implica sustituir al inquilino, mientras que el subarrendamiento, permite que el inquilino original alquiler parcial o totalmente la vivienda a un tercero, manteniendo su relación con el propietario.
Normativa
La cesión de un contrato de alquiler está regulada por la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), la cual establece las bases para este tipo de acuerdos.
La cesión es una herramienta útil cuando el inquilino necesita abandonar la vivienda antes del fin del contrato, pero requiere una correcta formalización para evitar problemas legales.
