26/12/2024
La rescisión de un contrato de alquiler por parte del propietario debe seguir siempre la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) y seguir un procedimiento formal.
En este artículo, te explicamos los pasos clave para garantizar que el proceso sea legal y efectivo.
1.Identificar una causa que lo justifique
El propietario solo puede rescindir un contrato de forma unilateral si existe una causa justificada. Algunas de estas razones pueden ser:
- Impago del alquiler.
- Uso indebido del inmueble: obras no autorizadas u otras acciones no permitidas.
- Necesidad del propietario o de un familiar directo de utilizar la vivienda como residencia habitual. Siempre tiene que haber un preaviso con al menos dos meses de margen.
2.Revisión del contrato
Antes de iniciar cualquier acción, se debe revisar el contrato para comprobar las cláusulas específicas relacionadas con la rescisión del contrato de manera anticipada: términos sobre preavisos, posibles indemnizaciones, etc.
3.Comunicación
Es obligatorio notificar al inquilino la intención de rescindir el contrato antes de lo acordado de manera escrita para que quede constancia. Este escrito debe incluir:
- La causa de la rescisión.
- El plazo del preaviso.
- La fecha de finalización del contrato.
4.Plazo para solventar incumplimientos por parte del inquilino
En caso de rescisión por incumplimientos del inquilino, debe establecerse un plazo razonable para corregir la situación antes de tomar medidas legales.
5.Inicio del proceso judicial
Si el inquilino no abandona la vivienda tras el preaviso, es necesario presentar una demanda judicial. Este proceso puede incluir una solicitud de desahucio y reclamación de rentas impagadas.
6.Entrega del inmueble
Una vez finalizado el contrato, se debe coordinar la entrega de llaves, inspeccionar el estado de la vivienda y devolver la fianza si no se han producido daños o deudas por parte del inquilino.
Recomendaciones
- Dejar por escrito todo el proceso: Guardar la copia de todas las notificaciones y acuerdos.
- Buscar asesoría legal: La ayuda de un profesional del sector es fundamental para evitar errores y conflictos legales.