25/09/2013
Pasados tres meses de la entrada en vigor de la obligatoriedad del Certificado Energético de Edificios Existentes para todos los inmuebles que se promocionen en alquiler, analizamos los datos más relevantes tras expedir más de 5.000 certificados energéticos.
¿Qué es la etiqueta energética?
La calificación energética nos indica la cantidad teórica de CO2 que se emite a la atmósfera para satisfacer la demanda energética que tiene un inmueble. Este índice es directamente proporcional al estado del inmueble y sus instalaciones e inversamente proporcional al tamaño de los mismos.
Toda vivienda que se promocione en alquiler tiene que contar con un certificado energético que permita informar al consumidor de su eficiencia energética. El sistema de clasificación es similar al de los electrodomésticos; de esta forma los inmuebles pueden obtener una calificación energética designada con las letras “A”, “B”, “C”… hasta la letra “G”, siendo la “A” la calificación correspondiente a los inmuebles más eficientes.
Factores generales que afectan a la etiqueta energética de viviendas
Los elementos que los profesionales cualificados tienen en cuenta para asignar una calificación energética a un inmueble son los siguientes:
Superficie del inmueble
Dos viviendas similares, en cuanto a calidad de su envolvente e instalaciones, tendrán diferentes calificaciones si difieren en el tamaño. Un inmueble con una superficie inferior a 50 m2 ofrece peores resultados de eficiencia energética que una de mayor tamaño, pues se alcanza una mayor optimización de la energía y de ahí que obtenga calificaciones más altas.
Estado de la envolvente
La envolvente de un inmueble es la que aísla a la vivienda de los agentes atmosféricos y las temperaturas exteriores o estancias no climatizadas. Este elemento se analiza en sus partes ciegas y en sus huecos.
-
De las partes ciegas se analiza el espesor y la configuración constructiva de sus materiales.
-
Los huecos son analizados por los elementos (ventanas y puertas) que los cierran. Así, dependerán del material de los perfiles de las ventanas, su acristalamiento y persianas.
En definitiva, lo que se analiza es la estanqueidad y permeabilidad.
Instalaciones y sus combustibles
Es muy importante la antigüedad de los generadores de ACS (agua caliente sanitaria) y climatización así como su grado de mantenimiento y sus combustibles.
Zona Climática
En función de la localización del inmueble, la zona climática donde se encuentre, altitud… las calificaciones energéticas varían.
En este cuadro presentamos los datos obtenidos en cuatro de las principales ciudades en las que hemos realizado el análisis:
|
|
A
|
B
|
C
|
D
|
E
|
F
|
G
|
|
Madrid
|
1,63%
|
1,63%
|
4,61%
|
26,15%
|
49,23%
|
7,69%
|
9,23%
|
|
Barcelona
|
0,49%
|
0,16%
|
5,83%
|
29,45%
|
54,85%
|
3,56%
|
5,66%
|
|
Valencia
|
2,32%
|
2,32%
|
11,63%
|
11,27%
|
53,48%
|
6,97%
|
9,97%
|
|
Sevilla
|
0%
|
0%
|
6,66%
|
6,66%
|
73,33%
|
6,66%
|
6,66%
|
Características energéticas de viviendas en Madrid
En esta zona, las envolventes suelen encontrarse en buen estado pero, debido a la gran demanda en calefacción, los inmuebles disponen de calderas individuales o comunes para la calefacción y la producción de agua caliente.
Las instalaciones, siempre que sean comunes, optimizarán el consumo y por tanto, se reducirán emisiones y obtendremos mejores resultados en las calificaciones.
En Madrid es habitual encontrar equipos de aire acondicionado con bomba de calor (frío y calor) para complementar las necesidades de calefacción en invierno, y éstos producen un consumo eléctrico considerable y por tanto, una alta emisión de CO2 y baja calificación. En estos casos recomendamos actualizar los equipos para mejorar la eficiencia.
La etiqueta energética de Barcelona
En Barcelona, las envolventes suelen encontrarse en buen estado, pero debido a la baja demanda en calefacción, sólo disponen de calentadores de gas o eléctricos para la producción de agua caliente sanitaria. En pocas ocasiones encontramos paneles captadores solares que optimizarán dicho consumo.
Sí es habitual encontrarnos en Barcelona con equipos de aire acondicionado de cierta antigüedad que producen un consumo eléctrico considerable y, por tanto, una alta emisión de CO2 y baja calificación.
Eficiencia energética de viviendas en Valencia y Sevilla
Valencia y Sevilla comparten resultados en nuestro análisis. En ambas zonas, las envolventes suelen encontrarse en buen estado, pero debido a la baja demanda en calefacción, sólo disponen de calentadores de gas o eléctricos para la producción de agua caliente sanitaria. En pocas ocasiones nos encontramos paneles captadores solares que optimizarán el consumo.
De nuevo, es habitual encontrarnos con equipos de aire acondicionado para paliar los efectos de las altas temperaturas en Sevilla y del factor de la humedad ambiental en Valencia, con resultado de alto consumo eléctrico y baja calificación energética.
Si necesitas más información sobre el Certificado Energético, pincha aquí.
Juan Luis Moraleda es Arquitecto Técnico certificador en Alquiler Seguro.