26/10/2018
En cada etapa de la vida tenemos unas necesidades diferentes y condiciones distintas: sueldos diferentes, trabajos en otras ciudades, cambian las personas con las que vas a compartir piso, etc. Todos estos cambios muchas veces se presentan de un día para otro, sin esperarlo. Por eso, una de las grandes ventajas que ofrece vivir de alquiler es la posibilidad de cambiarte de una vivienda a otra siempre que sea necesario. O, simplemente, cuando te apetezca.
Cuando te encuentres en este tipo de situación, debes tener presente lo que supone y qué es lo que tienes que hacer: en especial, los trámites que tienes que seguir para rescindir un contrato de alquiler antes de que este haya finalizado. Si estás en esta situación presta atención al post, que te explicamos todos los pasos que hay que seguir (dependiendo de cada situación). Si no estás en esta situación, lee y acuérdate de este artículo para que tu próximo cambio en la vida no te pille desprevenido.
RESOLUCIÓN HABITUAL DEL CONTRATO DE ARRENDAMIENTO
Los contratos de alquiler se renuevan por anualidades hasta un máximo de tres años. Una vez cumplido todo este tiempo de forma completa, la renovación del contrato tiene que ser tácita por acuerdo de las dos partes.
Por ejemplo, si vives de alquiler en un piso y ya se ha cumplido la anualidad y has tomado la decisión de no continuar alquilando ese inmueble, lo primero que debes hacer es comunicarle al arrendador tu decisión, en tiempo y forma, 30 días antes de la finalización del contrato que regula el arrendamiento. Para llevar a cabo esta acción, lo más recomendable es que redactes un documento en el cuál se refleje tu intención de no continuar en la vivienda. De esta forma, se pueden evitar posibles rupturas contractuales. Así que, si simplemente se acaba tu contrato y no quieres renovar, lo único que tienes que hacer es comunicarlo. Fácil, ¿verdad?
RESCISIÓN ANTICIPADA
Sin embargo, no es necesario esperar a que el contrato de alquiler llegue a su fin si quieres cambiar de piso. Los inquilinos tenéis, además, la posibilidad de dar por finalizada la relación con el arrendador (y con el piso que tienen en alquiler) antes del tiempo estipulado en el contrato (normalmente, antes de que se cumpla el año).
Para poder hacerlo, en primer lugar, debe haber pasado un mínimo de seis meses desde la firma del contrato de arrendamiento. De nuevo, tenemos que acordarnos de notificarlo con 30 días de antelación al arrendador de la vivienda.
Si tu caso es este y, por cualquier motivo, quieres rescindir tu contrato de alquiler antes de tiempo debes fijarte bien en tu contrato y las condiciones de este. En algunos casos, en el contrato se suele incluir una condición que especifica que el arrendatario puede ser penalizado con la parte proporcional de la fianza legal.
NECESIDAD DEL PROPIETARIO
En la mayoría de las ocasiones, es el inquilino el que tiene la necesidad de rescindir el contrato de alquiler. Sin embargo, existen distintas situaciones que pueden llevar al propietario a querer dar por finalizada la relación contractual. Esto se debe en el caso de que el propio arrendador, un familiar de primer grado de consanguinidad o su cónyuge (siempre que exista una sentencia firme de divorcio) necesiten hacer uso de la vivienda que está alquilada.
En estas situaciones, el arrendador tiene que notificar al inquilino previamente con dos meses de antelación de que debe abandonar la vivienda. Eso sí, este caso puede tener lugar siempre y cuando haya transcurrido un año desde la firma del contrato.
Además, si eres un inquilino al que el propietario de la vivienda ha solicitado esa rescisión del contrato, debes tener en cuenta de que la vivienda tiene que ser ocupada en los tres meses siguientes al día que hayas abandonado el inmueble. Si no está ocupada durante este periodo de tiempo, tú como arrendatario estás en pleno derecho de iniciar los trámites para volver a restituir el contrato.
CÓMO FUNCIONA LA DEVOLUCIÓN DE LA FIANZA
Siempre que hayas dado por finalizado el contrato de forma correcta en tiempo y forma, devuelvas la vivienda en las mismas condiciones en las que fue entregada y no tengas ninguna deuda con el pago de tus obligaciones (renta y suministros), el propietario del inmueble que tienes alquilado debe proceder a la devolución de la fianza.
El importe debe ser el mismo que el que entregaste en el momento de la firma del contrato, siempre que no haya desperfectos ni reparaciones por mal uso de la vivienda o que hayan transcurrido más de 3 años y el importe se haya actualizado. No obstante, recuerda que, si finalizas el contrato antes de tiempo y lo indica en tu contrato, en ocasiones se restará la parte proporcional por el tiempo que falta hasta finalizar el contrato.
Recuerda que para que el arrendador te devuelva la fianza, debe solicitarla al organismo específico dónde la ha ingresado y, después de ello, reembolsarte a ti el importe. Por tanto, es un proceso que, en ocasiones, puede alargarse y puede tardar algo más de lo que esperabas (unos 30 días aproximadamente).
¿Te siguen quedando dudas de como rescindir un contrato de alquiler? Pregúntanos y te ayudamos.