13/11/2019
Con las temperaturas en pleno desplome, empezamos a notar los efectos del frio en nuestras casas. Llega el momento de encender la calefacción, estufas o chimeneas, para mantener nuestro hogar caliente, sin embargo, a la vez buscamos gastar los menos posible y que la factura no se dispare. Os traemos unos sencillos consejos para lograrlo.
La calefacción en uno de los principales gastos energéticos que tenemos en nuestras viviendas, según datos de Eurostat, el 43,4% del consumo de energía doméstica se destina en la calefacción del hogar. Por ello, es muy importante conocer trucos que nos ayuden a mantener nuestro piso de alquiler caliente, sin la necesidad de tener que tirar en exceso de la calefacción.
Como mantener la temperatura en una vivienda de alquiler
Fugas de calor
Aunque en muchas de las ocasiones no le prestemos atención las pequeñas fugas de calor hacen que nuestra casa nunca llegue a tener la temperatura idónea y a la vez no sólo entre el frio en casa, sino que desperdiciemos la energía y por tanto el dinero. Por ello es muy importante que revisemos y reparemos cualquier fuga de calor, ya sea una ventana que no cierra correctamente, como el deterioro de las juntas o el mal estado de las puertas. Todos estos elementos son clave en el ahorro energético y en el consumo responsable.
Reguladores de temperatura
Ahorra casi un 40% en tu factura con la instalación de reguladores de temperatura y temporizadores. Muchas calderas ya llevan este tipo de dispositivos incluidos, si no es tu caso, resulta interesante invertir en reguladores que nos ayuden a programar la calefacción, para que esta, comience a funcionar un poco antes de que lleguemos a la vivienda, y que corte el consumo cuando la vivienda ha alcanzado la temperatura deseada.
Mobiliario
Esta demostrado que los muebles son absorbedores de calor, esto es, que, si en algún momento están mal colocados o junto a los radiadores, nunca conseguiremos que el calor se expanda por la habitación, sino que se quedará atrapado en el mobiliario. Lo mismo ocurre con cortinas, textiles… Cuando más lejos de la fuente de calor, más calidez conseguirás en todas las estancias.
Por otro lado, hay elementos que nos ayuda a abrigar a nuestro piso de alquiler, uno de ellos son la alfombras, que además de desprender calor, nos ayuda a que la temperatura se conserve mejor. Lo mismo ocurre con los tapices y el mimbre, son elementos aislantes que además decorativamente quedan estupendamente.
Estufas sostenibles
A priori suponen una fuerte inversión, dependiendo de la capacidad, marca y modelo, sin embargo, ésta se amortiza en muy poco tiempo. Las estufas sostenibles, así como las calderas, no sólo suponen un ahorro económico, sino que también son una manera eficiente de calentar nuestro piso de alquiler. Por otro lado, los combustibles fósiles que utilizan, y que se caracterizan por su alto poder calorífico, permite conseguir rendimientos energéticos muy elevados.
Correcta temperatura
A la hora de poner la calefacción en una vivienda de alquiler es importante fijar correctamente la temperatura. Lo ideal y recomendable es que esta se encuentre en la horquilla que oscila entre los 19 a 20 grados, y es que por cada grado de más que subimos la temperatura el consumo energético aumenta hasta un 7% y por tanto el desembolso en la factura aumenta.
Otro aspecto importante de ahorro es apagar la calefacción cuando no nos encontremos en la vivienda. Una cosa es que la programemos para que ésta arranque un poco antes de llegar del trabajo, o antes de levantarnos, teniendo así nuestro piso caliente, y otra es mantener la calefacción encendida cuando no nos encontramos en casa. Mantener durante todo el día la calefacción porque supone mayor ahorro que encenderla y apagarla, es un falso mito.
¿Qué practicas llevas a cabo para mantener una buena temperatura en tu piso de alquiler? ¡Cuéntanos tus recomendaciones!